Las reuniones que se convocan en los
centros educativos entre las familias (padre/madre/tutores) y los profesores (tutores)
son sumamente necesarias y tiene que ser siempre beneficiosas para el niño.
Los principales objetivos de dichas
reuniones son: intercambiar información, resolver conflictos, analizar los
comportamientos o simplemente conocer las opiniones de las dos partes.
Las reuniones sirven para integrar de
forma coherente los ámbitos educativo y familiar.
Generalmente, cuando un profesor convoca
una reunión, surge en los padres la siguiente pregunta “¿para qué querrá vernos
el profesor/a?”. A veces, se asocia al hecho de que el alumno presente algún problema
o dificultad en el aula.
Existen dos tipos de actuaciones de los
padres frente a los tutores:
1.
Por un lado están las
familias que defienden constantemente a su hijo sin admitir la posibilidad de
que éste haya podido realizar algo de manera inadecuada en el aula o en el
centro escolar. Suelen echar la culpa de las actuaciones de sus hijos a los
demás (a los compañeros o incluso hasta a la propia profesora).
2.
Por otro lado están las
familias que se presentan a las reuniones con una mente abierta y con la
tranquilidad necesaria para escuchar al profesor/a. Este tipo de familias
suelen intentar cooperar con el centro educativo y coordinarse con él para
mejorar las actitudes o posibles problemas que se presenten sus hijos.
En función de las habilidades
comunicativas del profesor, también se pueden dar distintos tipos de comunicación. Aparecen resumidas y escenificadas en el siguiente vídeo:
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